sábado, 26 de septiembre de 2015

Semana Mundial de Lactancia Materna 2015

En España celebramos la semana de la lactancia durante la primera semana de octubre. Este año el lema propuesto a nivel internacional es AMAMANTAR Y TRABAJAR


En Cantabria, de momento, la asociación La Buena Leche ya ha presentado su propuesta:


Como podéis ver hay actividades en Santander y en Castro Urdiales.

En la web internacional de la semana mundial de la lactancia, que podéis visitar aquí, leemos:

La Alianza Mundial pro Lactancia Materna - WABA se complace anunciar el lema de la SMLM: AMAMANTAR y TRABAJAR ¡logremos que sea posible!

 Este año se cumple el 25 Aniversario de la Declaración de Innocenti 1990 que ha sido una guía clave para mejorar las prácticas de lactancia materna en todo el mundo. Las metas que se han adoptado, en particular la cuarta que se refiere a: “Aprobar legislación imaginativa protegiendo los derechos a la lactancia materna de las madres trabajadoras y establecido medios para su aplicación”, aún necesita mucha atención después de 20 años. 

El tema de la SMLM 2015 se enfoca en las mujeres trabajadoras y la lactancia materna. Este revive el tema de la SMLM de 1993 que giró en torno a la campaña por la Iniciativa de Lugares de Trabajo Amigables con las Madres. Mucho se ha logrado en estos 22 años de acción en todo el mundo para apoyar que las mujeres puedan amamantar y trabajar.

 La aprobación de la Convención revisada OIT 183 sobre Protección de la Maternidad, que tutela con mayor fuerza los derechos de maternidad, ha sido un particular avance. También, se han dado importantes acciones que mejoraron las leyes y prácticas nacionales. Sin embargo, en estos 20 años, la evaluación del progreso en la alimentación de lactantes, niños y niñas pequeñas muestra que la cuarta meta de Innocenti ¡es la más difícil de alcanzar! 

Con la campaña de la SMLM 2015, WABA y sus redes y asociados/as a nivel global, regional y nacional, buscan empoderar y apoyar a TODAS las mujeres que trabajan en los sectores formales e informales, para que puedan combinar su trabajo y la crianza de sus hijos e hijas, y en particular, para que puedan amamantar.

 ¡Qué podemos hacer! 

  1. Visite nuestro sitio web: http://www.worldbreastfeedingweek.org/ - con información sobre el tema de la SMLM y publicaciones que puede descargar y usar. 
  2. Comparta información sobre la Semana Mundial de Lactancia Materna (SMLM) 2015 con su familia, amistades, colegas, lugares de trabajo, autoridades locales, gobierno, y otros. 
  3. ¡ÚNASE al Concurso de Fotografía de la SMLM 2015! Vea el sitio web y llene el formalario (http://www.worldbreastfeedingweek.org/). Las 10 fotos ganadoras de la SMLM de este año, que se presentarán en el Fólder de Acción, Afiches y Banners serán premiadas con US$100. 
  4. Celebre la Semana Mundial de Lactancia Materna este año organizando una actividad en su localidad. Por favor, compártalo llenando un Compromiso que pondremos en el Mapa de la SMLM 2015 en el sitio web. Vea la muestra y formulario de compromiso en (http://www.worldbreastfeedingweek.org/)
  5. Una vez que organice su actividad, no olvide enviarnos su reporte (ofrecemos una guía de informe), y a cambio Ud recibirá un Certificado de reconocimiento de su ¡maravilloso esfuerzo por la SMLM 2015! 
Para más información contacte a: Jennifer Mourin, Coordinadora Mundial de WABA SMLM 2015, email: wbw@waba.org.my 

Trabajemos en conjunto para que AMAMANTAR Y TRABAJAR ¡SEA POSIBLE! ¡Gracias!

lunes, 21 de septiembre de 2015

La tejedora de los hilos del alma

Acabo de encontrar por ¿casualidad? este pequeño relato que pertenece al libro "LA TEJEDORA DE VIDAS: CUENTOS PARA SANAR EL ALMA FEMENINA" de ELENA GARCIA QUEVEDO , Ed. ELEFTHERIA

A veces te cruzas así, sin esperarlo, con palabras escritas por otra mano, otra mente-corazón, que reflejan tan profundamente tu propio sentir que te hacen parar en seco, leer dos o mil veces y guardar esas letras bien adentro, para sacarlas cuando haga falta, para ti o para tus comadres. En este espacio, mío, creado para compartir-nos, me propuse en su momento compartir temas que tuvieran que ver con las doulas, el maternaje, la crianza..pero todo se entrelaza en esta vida de hilos invisibles.

Mi hija se llama Ariadna, es mi maestra tejedora, y estas palabras también son para ella, niña-mujer que ya lanza sus hilos de colores para crear pasito a paso su propia vida.

                                                     Imagen de Liliana de la Quintana

Este texto es el primer capítulo del libro de la autora 'La tejedora de vidas. Cuentos para sanar el alma femenina', que publica la Editorial Eleptheria.

Hay una tejedora que habita en el alma de toda mujer para enseñarle a mirar su tiempo como un gran ovillo y sus dones como las agujas con las que dar formas a su vida. La tejedora del alma enseña a deshacer las zonas muertas y hacer alquimia con ellas transformándolas en abono para seguir adelante. Por eso dicen que cuando llegas a la casa de una mujer tejedora de alma has de poner mucha atención: Si entras y te regala una pipa, un tapiz hecho con sus propias manos o un cuento en realidad te entrega hebras perdidas que no has logrado domar o que ni tan siquiera conoces, claves para despertar a la tejedora del alma que duerme dentro de ti o, incluso, mira por dónde, palabras en forma de cuentos para abrirte a una nueva forma de mirar. Porque lo que jamás hace ninguna anciana tejedora ni ninguna mujer araña es perder el tiempo.
Los cuentos que narran la historia de las mujeres tejedoras del alma nacieron para recordar a toda mujer su enorme capacidad de restaurarse a sí misma, y su poder para construir el paraíso incluso en tierra baldía. Por eso quiero contaros la historia real de Ronin Wano, que también es una alegoría de la herida de todas las mujeres y del propio planeta.
Hace mucho tiempo en un país lejano ella era la única nieta que su abuela sabia educó para que puntada a puntada y palabra a palabra descubriera los hilos ancestrales que tejen la memoria e hilan la vida; para que susurrara las verdades al alma de las mujeres despistadas y sus palabras devolvieran las fuerzas y ganas de vivir. Al crecer la niña debía enseñar a todas las demás mujeres de su tribu para mantener vivo el alma de su pueblo y el espíritu del río. La llamaron Ronin Wano, servidora de la serpiente, porque en lo más profundo de las más oscuras aguas del río a cuya orilla nació habita una anaconda que guarda los saberes y secretos milenarios con que todas las  abuelas un día hilaron memoria, tejieron existencia y gestaron porvenir.
Durante muchos años la abuela envió a su nieta a lo más profundo del río para que aprendiera el idioma del agua y escuchara la historia de sus propias abuelas, a lo más alto de los más altos cedros para aprender los secretos que las hembras pájaros contaban a sus hijos y a los más difíciles riscos para perder el miedo a morir y a vivir. Cada noche de luna llena la abuela y la nieta se acercaban a las casas de las mujeres hastiadas para recordarles la fuerza de la flexibilidad y la fe en la vida. Pero cuando aquella niña creció todo cambió. Los árboles milenarios se talaban y se vendían para hacer parqué. Fue entonces cuando las hijas de sus hijas, que habían crecido contemplando un televisor, rechazaron su herencia y olvidaron el sencillo ejercicio de ser. Cuando Ronin Wano se convirtió en abuela su gente ya no se sentía unida a los árboles, ni al agua, ni a la luna; ni al vientre con sus ciclos. Fue entonces cuando la anciana supo que sus cuentos debían llegar a las mujeres de más allá del gran río que jamás habían aprendido a crear el tapiz de sus propias vidas y ahora debían tejer el gran tapiz de todos.
Hay un momento en la vida de cada mujer contemporánea en el que suele encontrarse frente a un cruce de caminos del que nadie antes le ha hablado: de un lado el camino marcado por la educación del mundo patriarcal en el que ha crecido donde encuentra hilos inservibles para tejer con el alma la vida que tiene frente a si, patrones demasiado estrechos, telas poco maleables y escasas posibilidades de fantasía. Al otro lado el reto de encontrar su propio hilo que casi siempre es invisible a los ojos pero no al corazón y que tiene el don de unir la herencia de las abuelas sabias con su propio camino y el de todas las mujeres. ¿Hacia dónde ir? ¿Cómo encontrar el hilo? ¿Cómo empezar a tejer la propia vida y sentirse completa? El periplo del viaje de la heroína también tiene estructura de tragedia griega: a veces la mujer muere para renacer, se hiela para descubrir, se agota para tomar fuerzas pero aprende a hacer alquimia con las emociones y encuentra dentro de si los hilos que la unen a todo. Eso enseña la vida, que siempre sigue adelante.
 Tengo una abuela centenaria que teje con sus manos colchas, vestidos, cortinas, paños mientras, sin hablar, enseña el arte de tejer la vida: cada cierto tiempo escoge una muestra de entre todas las que componen su lata de labor, la estudia, toma el hilo y teje con la mano derecha mientras con la mano izquierda cuenta hebras. En su danza de dedos une las órdenes de su cabeza y de su corazón sin perder de vista su objetivo. Mi abuela abre bien su ventana para que entre la luz, mira a través de los ojos del alma la lana sin hilar y en ella adivina lo que ya existe dentro de ella para proteger a los suyos del frío del corazón. Es al contemplarla cuando me doy cuenta que aunque durante miles de años bajo la sociedad patriarcal el alma de la mujer durmió, se silenció y sufrió la profunda herida que yo misma he heredado; el hilo invisible de memoria mantuvo viva la sabiduría femenina más allá de la mente, justo en el centro del corazón. Por eso la mujer se rompe cuando se aleja de lo que realmente importa. La tejedora del alma está presente en los cuentos de todas las sociedades ancestrales, y ha pervivido en la memoria como el genio dentro de la lámpara. ¿Recuerdas? la lámpara del cuento hay que saber frotarla para que el genio pueda revelarse; eso enseña la vida y la tierra.
Nací y crecí en un pueblo de meseta con monte y río donde la crudeza de la tierra enseña a vivir los ciclos y agita las entrañas. En invierno el frío voraz de la escarcha y los hielos empujan hacia dentro y en torno a las chimeneas hay gente que canta romances, en primavera llegan las flores cuando todos despertábamos a la vida, y los grandes paseos hasta el río del verano enseñan a fluir. Al llegar al otoño, cuando los manzanos se llenan de frutos, los mayores cuentan historias y desde las colinas del Duero a veces llega el aullido de la loba que ha dejado su manada para volver a empezar. Todo eso forma parte de mi herencia de mujer que olvidé al llegar a la ciudad. Cuando mi alma se congeló necesité buscar salida al laberinto atándome a un hilo muy fino que me llevó a la tierra de las amazonas donde Oriente y Occidente se unen, y hace miles de años la mujer y la tierra se hicieron una al servicio del alma del mundo, justo al lado del bíblico edén donde –por algo– la manzana sacó a los primeros hombres y mujeres del paraíso. Es allí donde, según Herodoto y los primeros historiadores, vivían las amazonas. Las ancianas tejedoras sembraron en el alma del mundo historias de diosas míticas cuyos periplos marcan caminos de curación y que aún hoy las viejas campesinas cuentan a sus nietas para que tengan bien presente que una mujer puede curarse cuando a una mujer se le hiela el alma.
Desde que comencé aquel viaje cada vez que alguien me cuenta una historia antigua, un mito o un cuento heredado suele ocurrir que siento como algo dentro de mí se abre para dejar que las palabras se instalen, fructifiquen y creen nuevos caminos; ¡nuevos comienzos!

lunes, 10 de agosto de 2015

Recomendaciones para amamantar con éxito - Salud Cantabria

Os quiero compartir hoy el enlace a un texto que aparece en la página www.saludcantabria.es  escrito por la pediatra Belén Matínez-Herrera, famosa en la región por ser una gran experta en lactancia y tener el título de consultora IBCLC. Es además una de las personas a quienes debemos en Cantabria el éxito y funcionamiento de la clínica de lactancia de la Residencia Cantabria, aunque por desgracia, ahora si queremos ser atendidas por Belén tenemos que acudir a su consulta privada ya que se prescindió de su trabajo en la clínica, lo cual, creo, fue una gran pérdida para todas las mujeres cántabras. Se que poco a poco, las personas a cargo de la clínica van adquiriendo más y más experiencia y pueden ayudar a todas las mujeres lactantes que lo necesitan,pero me hubiese gustado, como mujer cántabra. que Belén siguiera en ese puesto.

El texto contiene recomendaciones para amamantar con éxito y podéis leerlo y descargarlo haciendo click aquí 

Desde aquí agradezco a todas las personas que trabajan en sanidad que de verdad se forman en lactancia materna y ponen este conocimiento al servicio de las mujeres. Este camino de recuperación de la lactancia como forma mayoritaria de alimentar a nuestros bebés no es posible sin el apoyo de los profesionales y el entorno de la mujer embarazada, pero de verdad creo que vamos por el buen camino y cada vez es más raro encontrar pediatras sin formar o matronas y enfermeras que ofrecen biberón o chupete a los recién nacidos, más bien al contrario. Así que lo dicho, muchas gracias.

miércoles, 1 de julio de 2015

Respeto, ¿hasta donde?

El otro día tuve el enorme placer de reencontrarme con una gran amiga y compañera doula, con la que realicé la formación hace ya una temporada larga. Mientras nos poníamos al día fueron surgiendo temas relacionados con este mundillo, como no podía ser de otra forma. Admiro muchas cualidades de esta mujer pero, si tuviera que elegir una, sería, sin duda, su franqueza y su capacidad de llamar a las cosas por su nombre.

Uno de los temas que surgió y que es el que me ha traído hoy hasta aquí es el Respeto, así, con mayúsculas, arriesgándome a que mi otra gran amiga, la pelirroja pedante (xD), me eche una bronca por poner mayúsculas cuando me da la gana.

Me comentaba esta compañera doula que había decidido dejar de seguir en facebook a algunas personas que se llenan la boca con el respeto pero que después en su muro hacen una bola con él y lo tiran por el retrete. Y encima tiran de la cadena después. Según mi amiga, si respetas a todas, es a todas, hagan lo que hagan y lo hagan como lo hagan, Teta, biberón, porteo, carrito, parto por cesárea o natural...Y en eso estamos completamente de acuerdo. Creo firmemente en que una mujer embarazada tomará las decisiones que considere mejores para su bebe y para ella misma siempre, contando con la información que tenga y el bagaje personal con el que llegue. Y ahí está la clave para mi, la información y el bagaje.

Una mujer que vaya a ser madre debería poder acceder a toda la información sin necesidad de buscarla, en un mundo ideal, pero hoy por hoy no es tan sencillo. La mayor parte nos sentimos marionetas en manos de extraños que saben más y mejor lo que necesitamos nosotras y nuestros bebes y aún son muchas las futuras madres que no van más allá. Creo que una de las labores de las doulas es proporcionar a la mujer el espacio y los canales de información más amplios y variados posibles para que con todo ello, la futura madre se sienta capaz de tomar sus propias decisiones. Se sienta emponderada.

En cambio el bagaje o la mochila con la que llegamos a la maternidad es algo más complejo. En este caso la información no basta, el camino y proceso que nos lleve a ese mismo emponderamiento suele ser más largo que un embarazo. Y creo que es ese mismo bagaje el que hace que las personas, sean doulas o ingenieras, caigan en esas contradicciones; clamen respeto pero renieguen de él a la primera de cambio. Todas tenemos nuestras heridas, batallas, camino, alegrías y dolores, que nos hacen tal como somos, y nos hacen saltar ante determinados temas y situaciones, casi siempre de forma poco afortunada.

Si esto me sucediera, quisiera tener cerca a personas como estas amigas, para que desde el respeto me den una buena llamada de atención, que me ponga de nuevo en la senda y me haga ver las cosas desde la perspectiva y los zapatos de las otras. Porque sólo desde la empatía y el respeto es posible recorrer este camino.

Y vosotras, ¿respetáis a todo y a todas? Yo al final de la jornada tuve claro algo, respeto si, pero mi línea roja está en las personas que defienden cualquier tipo de maltrato o violencia. Por ahí no paso, se me acaba el respeto de golpe.


miércoles, 18 de febrero de 2015

Informe Doulas, informe infame


         Ante la polémica surgida por el ya famoso "Informe Doulas" redactado por el Colegio de Enfermería la Asociación Española de Doulas ha emitido este comunicado:               



                                       

Yo poco más quiero añadir. Hay en Change.org una recogida de firmas para pedir su retirada.

                         

viernes, 16 de enero de 2015

La importancia de los primeros momentos

Cuando nace nuestro bebé y hemos decidido dar pecho una mamá se siente emocionada, feliz, pero también cansada, un poco asustada y sin saber muy bien qué hacer y cómo hacerlo. En el ambiente hospitalario puede encontrar asesoría entre las enfermeras y pediatras bien formadas, aunque también puede encontrar mucha desinformación y confusión entre los mensajes que reciba, contradictorios y que generen desconfianza en la propia madre y su instinto y capacidad. Si sabemos que entre el personal hay IBCLC (asesoras de lactancia tituladas) o asesoras de lactancia, es recomendable que la madre recurra a ellas. Sino, puede ser buena idea contar con una asesora externa al hospital o una doula.

Los primero momentos con el bebé son muy importantes por muchos motivos: por el vínculo que se genera ahí, por el piel con piel, por el coctel hormonal que una mujer libera en ese momento, por el que libera el bebé...ya también, por supuesto por la lactancia materna. 

Cuando una mamá toma a su bebé en brazos por vez primera, lo huele, lo siente, lo mira, lo oye, y libera una gran cantidad de hormonas, entre ellas oxitocina y prolactina. La mamá ya no querrá separarse de su bebé ni un momento. Tendrá a su bebé sobre su pecho desnudo y si espera con su bebé sobre ella, puede que viva una experiencia maravillosa, que no siempre se da, es cierto, pero que si dejamos tiempo y espacio, sucedería muchas más veces de las que pensamos. ¡El agarre espontáneo!

        
                        Imagen tomada de la web de la liga de la leche (www.Illa.org)

Si el bebé se agarra espontáneamente la lactancia será mucho más fácil desde el principio (en la mayor parte de los casos) y además será una experiencia preciosa para mamá y bebé. Si aún así el agarre no fuera correcto es importante que la mamá se lo tome con calma y parctique hasta que consiga un agarre sin dolor y placentero, y la forma de conseguirlo es la que podemos ver en este cuadro:
     

Con paciencia y amor la mamá y el bebé disfrutaran de una lactancia duradera y maravillosa que les beneficiará mucho a ambos. 

Aunque lo más beneficioso para ambos será sin duda, y en cuanto la mamá se sienta con ganas, acudir a un grupo de apoyo a la lactancia, donde otras madres amamanten a sus hijos y compartan sus experiencias con ella, asesoradas por otras mujeres con experiencia y empatía. Vamos, la búsqueda de la tribu y el círculo de mujeres, ancestral y tan importante para criar a nuestros hijos.

sábado, 10 de enero de 2015

Violencia Obstétrica

Recientemente he tenido el honor de impartir una charla en la librería La Vorágine de Santander y, aunque es un tema que se trata muy habitualmente en reuniones con madres y con comadres, mientras preparaba la charla se fue generando en mi una indignación muy potente que me hace querer gritar a los cuatro vientos lo evidente que es lo que la sociedad ha hecho con las mujeres a lo largo de los siglos, y lo importante que es que recuperemos el poder sexual femenino y volvamos la mirada hacia dentro y hacia nuestros bebes, porque de fuera no va a venir el cambio.

Para preparar la charla retomé los libros de mi admirada Casilda Rodrigáñez y he descubierto a Silvia Federici. Además he utilizado estudios sobre violencia y feminismo redactados en varias universidades americanas muy interesantes. Solamente preparar la charla ha supuesto ya un viaje interesantísimo y revulsivo, como podréis imaginar.

¿Pero qué es la violencia obstetrica en realidad? En el debate posterior a mi charla hubo una mujer que me pedía que incluyera en la definición la violencia que una mujer recibe en la visita al ginecólogo normal, sin estar embarazada, de parto o en postparto. Que cuando una niña de 15 años acude a su primera revisión puede recibir violencia obstétrica. Bueno, podemos ampliar la definición, sin duda, a todos los ámbitos de la vida sexual de la mujer, pero actualmente la definición habla de la violencia ejercida por personal sanitario hacia una mujer embarazada, de parto, en postparto, lactancia, en periodo de preconcepción y no incluye aún el resto. Pero la reflexión puede ir más allá. ¿Una niña de 15 años o una mujer sana deben ir al ginecólogo a hacerse una revisión? En mi opinión, NO. Y tuve la gran suerte de que entre el público de mi charla había una conocida ginecóloga de Cantabria, que dijo exactamente eso mismo. Que al ginecólogo solo tenemos que acudir cuando hay un problema médico, no a hacer revisiones de rutina. Y es que el habernos creído que necesitamos esas revisiones sí debería ser considerado como violencia. Que miremos a nuestros cuerpos como potenciales enemigos, como centros de problemas y enfermedades, que tengamos tanto miedo a nuestra propia sexualidad que nos pongamos en manos de extraños para que nos tranquilicen...eso es violencia.
 Nos hacen vernos y sentirnos como enfermas desde nuestra primera menstruación, y no hablemos ya de cuando estamos embarazadas, o intentando quedarnos embarazadas, o de parto, postparto, menopausia... Delegar cada momento de nuestra vida sexual a médicos preparados para tratar enfermedades y problemas es VIOLENCIA. 

                                    
     

Tenemos la obligación de retomar el control sobre nuestra sexualidad, de conocer nuestros cuerpos, de transmitir ese conocimiento a nuestras hijas y empezar a sentirnos como mujeres completas, conscientes de nuestra sexualidad, de nuestros úteros, del poder de nuestra líbido y de nuestro sexo.
Cuando demos este paso habremos comenzado a terminar con la violencia obstétrica, porque cuando  una mujer es conocedora de su sexualidad y de sus procesos no delega tan fácilmente el desarrollo de esos procesos. No permite que la traten como un objeto ni se deja manipular por el miedo.

Os invito a comenzar este viaje de autoconocimiento, ¿os apuntáis?